El sistema de riego basado en sensores de humedad del suelo permite a Giropoma ser más eficiente

Desde el año 2018, Giropoma tiene implementado un sistema de riego basado en sensores de humedad del suelo para indicar la humedad y el agua disponible para los manzanos. Se trata de una red de sensores distribuidos por toda la zona productiva que, mediante los datos extraídos y una previsión climática, permiten dar unas recomendaciones de riego semanales a sus socios – productores. Estas recomendaciones se realizan dos veces por semana, y les resultan útiles por saber si tienen que aumentar el riego, o por el contrario, disminuirlo, o mantenerlo igual.

El método consiste en la monitorización del suelo basado en unas sondas que miden el contenido volumétrico de agua en el suelo, y en función de este volumen, conocen cuál es la cantidad de agua disponible. Los sensores se colocan en 20 cm de la superficie, para poder tener un control del agua que hay superficialmente; a 40 cm, donde se encuentran la cantidad más relevante de raíces de los manzanos; y a 60 cm, la zona donde ya no hay raíces y el agua no está disponible para los árboles.

Estas herramientas, que proporcionan información sobre la distribución aproximada de agua en el suelo, permiten a la compañía comprobar cuál es el grado de humedad, y si el riego que se está llevando a cabo es correcto. Es decir, que el agua llega hasta 40 cm de la superficie, donde se encuentran las raíces de los manzanos, o por el contrario, el riego es insuficiente, o se está destinando más agua de la necesaria.

Sin embargo, los datos son orientativos y hay que conocer el tipo de suelo y el campo en cuestión. Por este motivo, Giropoma dispone de distintos puntos donde monitorizan la humedad del suelo, puesto que cada terreno tiene diferentes formas de obtención de agua y diferentes tipos de suelo.

En los últimos años, con este sistema basado en sensores de humedad del suelo, la empresa ha detectado una disminución del agua de riego del 30% respecto al método del balance hídrico que se utilizaba anteriormente. Es decir, se está regando menos respeto la forma tradicional de calcular las necesidades de riego. La forma de calcular las necesidades basadas en sondas, con sensores en el suelo, los ha permitido utilizar menos agua y, por lo tanto, ser más eficientes y racionales.

Hace 5 años que la compañía implantó este método 100% eficiente y, todo y el excepcional estado actual de sequía, no ha tenido que tomar ninguna medida especial ni hacer ninguna modificación en cuanto a racionamiento de agua y recomendaciones de riego, gracias a esta acción de optimización del riego que ya hace tiempo que se implementó.

En este caso, el que sí que juega un papel importante por Giropoma es la aclarada de los frutos, poniendo énfasis en esta práctica para asegurar la viabilidad y la calidad de las manzanas de la nueva campaña. Es de vital importancia asegurar que las unidades de frutos que puedan llegar a la cosecha tengan la calidad deseada, así como evitar posibles campos con exceso de fruta. De este modo, el resto de frutos se pueden desarrollar correctamente y se contribuye en el ahorro de agua.

Actualmente, la carencia de lluvias y la poca disponibilidad de agua que acentúan el episodio de sequía, dificultan el proceso productivo de las manzanas y del resto de cultivos.

La nueva apuesta de Giropoma por la tecnología: la mecanización de la línea de confección de bandejas

La tecnología siempre ha sido una gran apuesta para Giropoma. La innovación forma parte del ADN de la empresa y, por lo tanto, es clave mecanizar y automatizar los procesos el máximo posible. Recientemente, la compañía ha hecho una nueva apuesta por la tecnología y ha mecanizado la línea de envasado de bandejas, que recientemente ha empezado a funcionar, para agilizar el proceso, reducir el tiempo de confección, aumentar la capacidad de respuesta y ser más eficientes, flexibles y competitivos.

El objetivo principal de robotizar esta línea ha sido minimizar la manipulación, reduciendo los procesos que no aportan valor añadido y mejorando la calidad, puesto que permite evitar posibles golpes, defectos de bandejas…, así como aumentar el rendimiento.

En cuanto al proceso que siguen las manzanas, después de la conservación, se han seleccionado automáticamente mediante una máquina para tal fin, la precalibradora, que las clasifica por calibre, color y calidad. Una vez precalibradas, se guardan en una cámara de frío, a una temperatura alrededor de 3 °C, hasta que se confeccionan, en este caso en formato bandejas.

El tipo de envasado que confecciona esta nueva línea es en formato de bandejas selladas con etiqueta. Actualmente, existen muchos de diferentes, pero hasta hace pocos años, solo disponíamos de uno de cartón y film plástico PVC, que se ha ido sustituyendo por opciones más ecológicas y sostenibles. Así pues, se ha apostado por las bandejas de celulosa cerradas con etiqueta, de 4 y 6 piezas las más comunes, que se diferencian de las tradicionales porque las alas quedan unidas mediante la etiqueta y rodean la fruta de dentro.

EROSKI etiqueta 5 SAFATES (2)Formato sellado con etiqueta

La reducción de la manipulación de las manzanas también ha sido un elemento clave de esta nueva línea, permitiendo así alargar su vida útil.

Hay que destacar, también, que el hecho de automatizar este proceso, ha eliminado la manipulación manual de cajas, una estrategia que contribuye a la mejora continua de Giropoma de la calidad laboral de los trabajadores y trabajadoras de la compañía.